rhapsody 发表于 2010-4-23 00:51

【2008.9.4 西班牙先锋报】萨马兰奇:我为什么爱中国,尊重中国

【中文标题】萨马兰奇:我为什么爱中国,尊重中国
【原文标题】Por qué quiero y respeto a China
【登载媒体】西班牙先锋报
【来源地址】http://www.lavanguardia.es/inter ... na-deng-xiaopi.html
【译者】rhapsody
【翻译方式】软件+人工(网上流传的译文不完整,不过本译文也有所借鉴)
【原文库链接】http://bbs.m4.cn/thread-239941-1-1.html
【声明】本文供Anti-CNN/ACCN使用,未经译者或AC同意,谢绝转载;谢谢合作。
【译文】



中国人民懂得珍惜患难之交,不会忘记患难时期与自己站在一边的人。
        刚刚结束的北京奥运会所在竞技上和组织上取得的成功得到了国际舆论的普遍认可,而这也使我想与《先锋报》的读者们分享我与中国人民之间结下长久友谊的缘起和缘由。

        当年,我受国王卡洛斯一世的任命在民主过渡时期出任西班牙驻苏联和蒙古大使,我也是在和苏联恢复外交关系后首位驻莫斯科的西班牙代表。我无法掩饰的一个事实是,这个地方使我可以充分地筹备竞选国际奥林匹克委员会(奥委会)主席,而当时的主席基拉宁勋爵已经宣布将不再参选。

        在莫斯科度过的是一段让人兴奋不已的时光:这座城市及其官员当时正处于承办奥运会(1980年7月举行)的过程中,奥委会的委员们也频频造访苏联首都,视察组织工作的进度。在投票之前与奥委会同事们的交流,使我可以向他们阐述自己的奥运会远景计划,赢得他们的信任。同样是在此期间,我和当时的巴塞罗那市长纳西斯·塞拉开始进行了非常审慎的几次交流,谈及如果我当选奥委会主席,巴塞罗那就递交申办奥运会的可能性。所有这些后来都一一实现了。在奥委会第83次会议的选举后,我与塞拉的谈话确定了几代人为之奋斗的目标:巴塞罗那——奥运之城。

        当时与我一同抵达西班牙驻莫斯科大使馆的是一秘欧亨尼奥•布雷戈拉特,那时还是一个年轻外交官,后来开拓出了成功的外交生涯,两度成为西班牙驻中国大使,外交界仅此一人。在担任西班牙大使期间我与来自一些友好国家的同事保持着良好的关系。我尤其记得联邦德国大使(数年后他出任联邦德国的情报官员),曾在1988年汉城奥运会举行前的艰难时刻给了我很大帮助。

        各国外交官之间的接触非常频繁,我曾多次前往位于列宁山的中国大使馆。会面在室内进行,严丝合缝,以免对话内容被录音。

        在那些年,虽然苏联和中国都是共产国家,但双方相互疏远,政治上的差异也很明显。中国大使馆的另一个特色是在其花园的大片田地里种植了足够维持生存的作物,以避免两国关系不好导致冲突或孤立时受到影响。

        就在当时,我们开始处理关于恢复中国在国际奥委会地位的事情。最初的工作是由我的前任——基拉宁主席负责的,然而最终谈判直到1979年才举行。台湾方面不肯接受我们提出的解决方案:那就是他们要把名称更改为“中华台北”,而国际奥委会将承认新的中国奥委会。这个方案起初不被接纳,台湾方面还雇用了洛桑一家有名的律师行来进行上诉。

        我不能失去这个历史机遇,在上任主席四个月后,我们达成了一个前所未有的折衷协议,而这主要归功于中国领导层的宽宏大量。当时中国领导人是邓小平,新中国改革开放的总设计师。多亏中国人表现出的务实精神,中国奥委会得到了(国际奥委会)承认,而中华台北奥委会也得以保留在了我们的组织中。

        这个协议让来自台湾岛的年轻人得以继续参加奥运会以及遵循国际奥委会规章的各国际(体育)联合会所举办的赛事。我们使得在体育领域中,中国大陆和台湾的共同存在成为现实;但不幸的是,在联合国、联合国教科文组织、红十字会以及其他国际组织里不是这样,政治家们未能从体育界的先例中找到门道。

        我终于有机会感谢邓小平先生。虽然他个头不高,但却是一位历史伟人。是他的慷慨邀请让我得以在1984年登上天安门城楼,观看通过天安门广场的大阅兵。城楼上面悬挂着大幅的毛主席画像,而城楼进去就是紫禁城。当我得知我和我的妻子是当时惟一受邀登上城楼的西方人时,我的惊讶之情可想而知,正如图像记录的那样。

        国际奥委会号召承认中国体育在奥林匹克运动中的地位让中国开始渐渐视我为可信赖的朋友。接下来发生的事情可以证明这一点。1984年,苏联号召抵制洛杉矶奥运会。虽然苏联体育部长玛拉特•格拉莫夫向我保证不会抵制,但威胁在悄然逼近。尽管我的斡旋人员尽了很大努力,和(美国)里根政府的国务卿乔治•舒尔茨,以及长期担任苏联外长的安德烈•葛罗米柯的会谈还是令人绝望地朝着抵制的结果发展。

        苏联国内的局势——安德罗波夫的突然逝世和契尔年科的接任——并未使形势变得乐观。虽然苏联鼓动其势力范围内的国家一同抵制这次奥运会,但中国、南斯拉夫和罗马尼亚却挑战苏联的权威,依旧出现在了奥运会的赛场上。我至今还记得中国代表团步入洛杉矶纪念体育场时的情景———观众以雷鸣般的掌声对其表示欢迎。加州公众同样把掌声献给了中国代表团奥运历史上的第一枚金牌,以及第一枚金牌的获得者——自选手枪项目的射击运动员许海峰,他战胜了曾在慕尼黑奥运会上夺得金牌的瑞典运动员。

        中国在第一次参加的奥运会中就获得了32枚奖牌,而其参加奥运会的举动挑战了苏联集团的抵制,也赢得了西方的尊敬和赞赏。

        胜利过后,中国人开始认真地考虑在不远的未来举办一届奥运会的可能。我视同兄弟的中国委员何振梁当选国际奥委会副主席,他开始积极地鼓励北京将来申办奥运会。最后他们决定申办2000年奥运会的申办:中国想要以此来迎接新千年的到来。中国的领导层熟练地开展工作,并聪明地为此进行宣传。

        在巴塞罗那奥运会期间,我接见了北京市长及其带领的庞大代表团,在那。之后在1993年召开的蒙特卡洛国际奥委会第101次会议上,奥委会成员将从以下五个城市中作出抉择:柏林、伊斯坦布尔、曼彻斯特、北京和悉尼。然而,北京仅以两票之差败给了悉尼,而有些事情也最好不要记起。中国人尊重结果,输得起,但不会忘记。

        在此之后我依然坚持我的看法,那就是北京不应就此认输,放弃在未来继续申办。我把这个看法传达给了邓小平的继任者江泽民。但中国主席态度坚定——不管我的建言,跳出申办行列。北京不会申办2004年奥运会——最终由雅典承办。但我不会放弃,因为我有一个坚定的信念:21世纪的奥林匹克运动不能没有伟大的中国,奥林匹克大家庭也不能没有13亿中国人民——因为这将使我们变得更加强大。

        在那些年里,世界见证了中国经济的飞速发展,也见证了这个世界上人口最多的国家是如何跃升为世界大国的过程。终于,江泽民主席告诉我,中国的首都,北京将申办2008年奥运会。

        2001年7月,在莫斯科举行国际奥委会全会后,我就要离任,也正是在这次会议期间国际奥委会作出了两项历史性决定:一是选出了罗格作为我的接替者;二是宣布北京为2008年奥运会的举办城市。北京在第二轮投票中以过半数的得票战胜了其他三个候选城市(巴黎、多伦多【原文误为大阪——译注】和伊斯坦布尔)。

        在通往2008年的道路上,等待中国当局的并非一切都是令人愉快的。在7年的筹备工作中,反对人士的阻挠一直都不曾间断过,直到奥运圣火在鸟巢熄灭的那一刻:

中国被牵涉进了(苏丹)达尔富尔的危机(中国是一个为非洲提供了很多援助,为非洲的发展进行了很多投资的国家);斯皮尔伯格辞去奥运会开幕式顾问一职;西藏问题;伦敦和巴黎火炬传递发生的意外;一些政治人物呼吁抵制开幕式;污染问题可能影响体育赛事的正常举行;交通问题可能影响运动员抵达赛场;缺乏言论自由和互联网接入口;还有传言称北京奥运会上不会有记录被打破(实际上打破了43项世界纪录和132项奥运记录!)。所幸的是,所有威胁都没有达到目的,北京奥运会的成功举办让这些声音消失了。

        奥运会对中国来说是一个让世界了解其文化的契机,也是让中国人民敞开胸怀自由地与世界人民交流、享受“奥运精神”的机会。这届奥运会已成为(中国)人民的伟大胜利,多亏了(中国)政府的决心和支持,不惜经济资源;北京奥运会也赢得了全世界的敬佩,多亏了五十万志愿者的微笑和热忱服务。这将是一次以后很难超越的圆满胜利。我在私下场合对胡锦涛主席如是说。

        奥运会花费了多少将是一个谜。但对于“鸟巢”和“水立方”这样的建筑奇观来说,这并不重要。这不是被简单花掉的钱,而是用在构建一个伟大国家未来的钱,这个国家在15至20年后将成为引领世界的强国。没有人怀疑,中国现在是无法否认的一个存在。

        经济的飞速发展改变了社会结构,出现了新的社会阶层,数以百万计人群的生活水平得到了提高。在中国发生的一切都称得上“巨大”,也让西方人很难理解。对此一个简单的例子是:西方人能理解山东省烟台市的南山高尔夫球场占地达130万平方米,距离长达225洞吗?换句话说,相当于12个18洞的高尔夫球场再加上一个9洞的。

        中国人民是一个拥有非凡记忆力的民族,他们懂得珍惜患难之交,不会忘记患难时期与自己站在一边的人。正因为如此,在这次北京奥运会上,我才能享受到中国人民的友谊和对我的爱,这是很难用言语表达的情感。30年来我29次访问中国,而下一次将是代表国际奥委会主席在7天后参加残奥会的开幕式。这些年里我从中国收获了爱和友谊,也学会了爱与尊重中国人民。

【译者感言】旧文重温,缅怀萨翁

【原文】

El éxito deportivo y organizativo de los recientes Juegos Olímpicos de Pekín, con el reconocimiento unánime de la opinión pública internacional, me anima a compartir con los lectores de La Vanguardia los orígenes y razones sobre mi ya larga relación de amistad con el pueblo chino.

En plena transición democrática, el rey Juan Carlos I me nombró embajador de España en la Unión Soviética y Mongolia, siendo el primer representante español en Moscú tras el restablecimiento de las relaciones diplomáticas con la entonces URSS. No puedo ocultar que este destino me permitió preparar a conciencia las elecciones a la presidencia del Comité Olímpico Internacional (COI) una vez que lord Killanin, el entonces presidente, había anunciado su intención de no presentarse a la reelección.

Moscú vivía un apasionante momento: la ciudad y sus autoridades estaban inmersos en el proceso de organización de los Juegos de la Olimpiada, a celebrar en julio de 1980, y la capital soviética era visitada permanentemente por los miembros del COI para seguir el estado de los trabajos organizativos. Estos contactos con mis compañeros del COI me permitieron compartir con ellos mis futuros planes olímpicos y ganarme su confianza de cara a las urnas. Asimismo, durante este periodo, de forma muy discreta, se iniciaron los contactos con el entonces alcalde de Barcelona, Narcís Serra, planteando la alternativa de que si saliera elegido presidente del organismo olímpico, Barcelona pudiera presentar su candidatura a la organización de los Juegos. Todo se cumplió al pie de la letra. Tras mi elección en la 83.ª sesión del COI, se reanudaron las conversaciones con Serra de cara a conseguir el reto pendiente de varias generaciones: Barcelona, ciudad olímpica.

En mi destino en la embajada de España en Moscú conté con la colaboración, como primer secretario de embajada, de Eugeni Bregolat, entonces un joven diplomático, quien posteriormente desarrollaría una brillante carrera llegando a ser nombrado embajador de España en China en dos ocasiones, algo único en el mundo diplomático. Durante este periodo como representante de España, mantuve una buena relación con otros colegas de países amigos. Recuerdo muy especialmente al embajador de la República Federal de Alemania que años más tarde, en su destino como alto cargo del servicio de información de la RFA, me ayudó notablemente en los difíciles prolegómenos de los Juegos de Seúl en 1988.

Los contactos entre los diplomáticos eran habituales y yo asistía con bastante frecuencia a la sede de la embajada de la República Popular China, en las colinas de Lenin. Las reuniones las manteníamos en una habitación, convenientemente acolchada, para evitar la posibilidad de que las conversaciones fueran captadas por medios de grabación.

En aquellos años, a pesar de que la URSS y China profesaban el ideario comunista, estaban muy alejadas y eran evidentes sus diferencias políticas. Otra particularidad de la sede diplomática china es que se asentaba en un gran terreno y en sus jardines se podían cultivar suficientes alimentos para garantizar su subsistencia en caso de sufrir un bloqueo o un aislamiento como consecuencia de las malas relaciones entre ambos países.

En estas circunstancias empezamos a tratar del ingreso de China en nuestra organización. Los primeros pasos los había dado mi antecesor, el presidente Killanin, aunque las conversaciones definitivas se desarrollarían en 1979. Taiwán no quiso aceptar la solución que le proponíamos: debían cambiar el nombre y pasar a denominarse Comité Olímpico de la China Taipei (TPE, en sus siglas en inglés) mientras que el COI reconocía el nuevo Comité Olímpico Chino. La propuesta, inicialmente, no fue aceptada y Taiwán contrató a un famoso gabinete de abogados de Lausana para recurrir la decisión.

No podía perder esta ocasión histórica y a los cuatro meses de asumir la presidencia, llegamos a un acuerdo de compromiso que no tiene precedentes y que se debió fundamentalmente a la generosidad de los dirigentes de la República Popular China, ya liderada por Deng Xiaoping, el verdadero arquitecto de la nueva China que inició la apertura a Occidente y puso en marcha las primeras reformas económicas. Gracias al sentido práctico del que hacen gala los chinos, se reconocía el Comité Olímpico Chino y se mantenía en nuestra organización al Comité Olímpico China Taipei.

Este acuerdo permitía que la juventud de la isla de Taiwán continuara participando en los JJ.OO. y que las federaciones internacionales siguieran el camino marcado por el COI. Conseguimos que esta posición de convivencia entre la China continental y la China insular se hiciera realidad en el deporte, aunque lamentablemente en la ONU, la Unesco, la Cruz Roja y otras organizaciones internacionales no sea así, y los políticos no hayan sabido seguir el ejemplo de los deportistas.

Tuve oportunidad de agradecerle a Deng Xiaoping, pequeño en estatura física pero gigante en visión histórica, su gran generosidad con motivo de una invitación que me cursó para asistir en 1984 a la tribuna de honor, un lugar emblemático del régimen comunista, presidido por una monumental imagen de Mao, que da paso a la Ciudad Prohibida. Esta tribuna de honor se usa para presenciar las grandes paradas militares que desfilan por la plaza Tiananmen. Mi sorpresa fue mayúscula al comprobar que los únicos invitados occidentales en esta tribuna de honor éramos mi esposa Bibis y yo, tal como certifican los testimonios gráficos.

Alentar el reconocimiento olímpico del deporte chino supondría que la República Popular China pasaba a considerarme un amigo leal. Y enseguida surgiría la ocasión para demostrarlo. En 1984, la URSS alentaba el boicot a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles. A pesar de que el ministro de Deportes de la URSS, Marat Gramov, me aseguraba que no estaban por el boicot, la amenaza acechaba. Las conversaciones con George Shultz, secretario de Estado de la Administración Reagan, y con el sempiterno ministro de asuntos Exteriores de la URSS, Andrei Gromiko, conducían irremediablemente al boicot a pesar de mis esfuerzos negociadores.

La situación interna en la URSS, la súbita muerte de Andropov y la llegada al poder de Chernenko no permitían ser optimista. La URSS atizaba el boicot de los países de su área de influencia aunque China, Yugoslavia y Rumanía desafiaron esta medida y sí estuvieron presentes en la cita olímpica. Recuerdo la entrada del equipo chino en la pista del Estadio Coliseum de Los Ángeles, recibido con una ovación atronadora. La misma con la que el público californiano premió la primera medalla de oro obtenida por China en unos JJ.OO. y que entregué personalmente al deportista de tiro con pistola Xu Haifeng, tras superar a un tirador sueco que había ganado oro en Munich.

China, en su primera participación, obtuvo un total de 32 medallas y con su presencia, desafiando el boicot comunista, se ganó el respeto y la admiración de Occidente.

Tras los éxitos deportivos, los chinos empezaron a valorar muy seriamente la posibilidad de albergar y organizar los Juegos en un futuro próximo. El miembro chino del COI, Zhenliang He - a quien considero mi hermano chino-, había sido elegido vicepresidente del COI y se empezó a alentar una futura candidatura de Pekín. Al final se decidieron por aspirar a los Juegos del 2000: querían celebrar con este gran evento la entrada al nuevo milenio. Los dirigentes de la candidatura se movían con destreza y difundían brillantemente su proyecto.

En Barcelona, durante los Juegos, recibí al alcalde de Pekín y una amplia delegación, que me trasmitieron su entusiasmo y la esperanza de lograr la nominación. En la 101.ª sesión, en Montecarlo en 1993, los miembros del COI debían elegir entre cinco ciudades: Berlín, Estambul, Manchester, Pekín y Sydney. La ciudad australiana ganó por sólo dos votos de diferencia y con algunos incidentes que es mejor no recordar. Los chinos acataron la decisión, supieron perder pero no olvidar.

Dejé pasar un tiempo prudencial para insistir en mi propósito: Pekín no debía tirar la toalla y renunciar a organizar los Juegos en un futuro. Así se lo hice saber a Jiang Zemin, proclamado nuevo líder chino en sustitución de Deng Xiaoping. El presidente de la República Popular China se mantuvo firme: no atendió mis recomendaciones y decidieron dejar pasar turno. Pekín no optaría a la cita del 2004, que finalmente se otorgó a Atenas. Mi insistencia no cejaba porque se basaba en una idea fija: el Movimiento Olímpico debía conseguir comprometer a la gran nación china, y a sus más de 1.300 millones de habitantes, en el proyecto olímpico del siglo XXI. Eso nos haría más fuertes.

Durante aquellos años, el mundo observaba el vertiginoso crecimiento de China y cómo el país más poblado del mundo llevaba camino de convertirse en una gran potencia. El propio presidente Jiang Zemin, antiguo alcalde de Shanghai, me informó de sus intenciones: finalmente habían decidido que la capital china, Pekín, aspiraría a organizar los Juegos del 2008.

En la sesión de Moscú, en julio del 2001, me despedía del cargo y fue allí cuando el COI adoptó dos decisiones históricas: la elección de mi sucesor en la presidencia del COI, que recayó en la figura del cirujano belga Jacques Rogge, que está demostrando ser un gran presidente, y pude proclamar la elección de Pekín para organizar los Juegos del 2008 al imponerse en la segunda ronda de votaciones a las otras tres ciudades candidatas (París, Osaka y Estambul) por una amplia mayoría.

Desde el primer día se vio que el camino hacia el 2008 no sería placentero para las autoridades chinas. Los lobbies iniciaron una campaña de desgaste que se extendería durante los siete años de trabajos preparatorios y que no culminaría hasta que el fuego olímpico se apagó en el "nido del pájaro".

La crisis de Darfur y la implicación de China (la República Popular es el país que más ayudas vehicula a África y que realiza mayores inversiones para el desarrollo del continente); la dimisión de Steven Spielberg como asesor de las ceremonias olímpicas; la cuestión del Tíbet (el propio Dalai Lama defendía la celebración de los Juegos); los incidentes en Londres y París durante el recorrido de la antorcha olímpica; las llamadas de algunos políticos al boicot a las ceremonias; el alarmismo mundial creado por los presuntos problemas de contaminación que iban a dificultar la normalidad en algunas pruebas atléticas; los problemas de un tráfico congestionado que impediría la movilidad de los atletas; la falta de libertad de expresión y de acceso a internet; la difusión de que en Pekín no se batirían récords (¡se rompieron 43 récords mundiales y 132 olímpicos!). Todas estas amenazas, afortunadamente, no se han cumplido y el éxito ha hecho callar las voces más alarmistas.

Los Juegos han sido una gran ocasión y un pretexto para que China diera a conocer al mundo su cultura milenaria y para que el pueblo chino conviva y se relacione abierta y libremente con sus huéspedes, disfrutando de lo que en la Carta Olímpica se conoce como "espíritu olímpico". Los Juegos han sido el gran éxito de un pueblo, gracias al compromiso y el aval del Gobierno que no ha escatimado recursos económicos.

Los Juegos de Pekín han sabido ganarse la admiración del mundo, gracias a la simpatía y la cordialidad del medio millón de voluntarios, que se ofrecían ansiosos en acoger a los visitantes. Los Juegos han sido un éxito rotundo que va a resultar muy difícil de igualar en el futuro. Tuve ocasión de expresárselo así al presidente Hu Jintao en el transcurso de la audiencia privada que me concedió.

Será un misterio saber cuánto han costado estos Juegos. Pero qué poco importa ante las instalaciones deportivas como el "nido de pájaro" o el "cubo de agua", auténticas maravillas arquitectónicas. No se trata de un dinero gastado, sino de un dinero bien invertido para consolidar el futuro de una gran nación, que dentro de 15-20 años puede ser la primera potencia del mundo. Nadie pone en duda que China es hoy una realidad incontestable.

El auge económico ha cambiado la estructura social de la población, con la aparición de nuevas clases sociales y la mejoría de la calidad de vida de millones de personas. Todo en China adquiere una dimensión gigantesca y, a veces, resulta de difícil comprensión para los occidentales. Un simple ejemplo avala esta afirmación: ¿puede entender un occidental que el campo de golf de Nanshan, en la ciudad de Yantai, provincia de Shandong, tenga una superficie de 1,3 millones de metros cuadrados con un recorrido de 225 hoyos? O sea, 12 campos de 18 hoyos y 1 de 9.

Los chinos son gente que goza de una gran memoria y que saben mostrar su profundo sentido de lealtad hacia las personas que en los momentos difíciles han sabido estar a su lado. Por ello en estos Juegos, los últimos designados bajo mi presidencia, he podido disfrutar de reiteradas muestras de amistad y cariño que es muy difícil de agradecer con palabras. En mis últimos 30 años, he tenido la ocasión de viajar a China en 29 ocasiones, y la próxima será para asistir el próximo día 7 a la ceremonia inaugural de los Juegos Paralímpicos, representando oficialmente al presidente del Comité Olímpico Internacional. En el transcurso de estos años, he recibido de China muestras de afecto y amistad, y he aprendido a querer y respetar al pueblo chino.

BK6141 发表于 2010-4-23 01:05

是个不错的老头~

vivicat 发表于 2010-4-23 01:07

缅怀萨翁。

PS:西班牙语!!rha乃是多功能复合型人才!!o3O105){:12_543:}

sewn 发表于 2010-4-23 03:01

感动呀,中国的朋友

zhongdong_wang 发表于 2010-4-23 04:38

谢谢楼主提供原文。保存了,留作纪念。

下个月 发表于 2010-4-23 08:07

http://bbs.m4.cn/thread-239941-1-1.html原文库链接

小宇凡 发表于 2010-4-23 08:12

Q62)Q62)

航海者 发表于 2010-4-23 10:57

向萨翁致敬~~~
中国人民永远的朋友

快乐考拉 发表于 2010-4-23 11:12

是个好人,做为一个西方人,算是一个很了解中国人的人了。

zyr7533329 发表于 2010-4-23 12:23

萨马兰奇,唉,太可惜了

他一直是我最尊敬的西方人之一

cslz 发表于 2010-4-23 12:26

学会爱与尊重!

amojo 发表于 2010-4-23 13:20

miss u....

和谐共生 发表于 2010-4-23 14:49

中国在世界上可以信赖的朋友真是不多,萨翁绝对是其中一个,他的离世真让人遗憾.记得在北戴河有个奥林匹克公园,里面有很多雕像,萨翁的雕像最像本人,与其合影的人很多,鼻子被摸得亮亮的,非常受欢迎,我们全家都和他的雕像合影了,现在我很想去那里给他献花,希望他在天堂无忧无虑......

滔滔1949 发表于 2010-4-23 15:28

“输得起,但不会忘记”

这话说的好

耳冉子 发表于 2010-4-23 16:39

祝萨翁在天堂快乐!

djb929 发表于 2010-4-23 18:15

萨翁走好

ben07jiang 发表于 2010-4-23 20:41

求同存异!
一个好人!
Q20)

rhapsody 发表于 2010-4-23 23:12

原文库链接
下个月 发表于 2010-4-23 08:07 http://bbs.m4.cn/images/common/back.gif
多谢提醒,主帖里已补上 O(∩_∩)O~

morusluo 发表于 2010-4-24 00:24

lz辛苦了
纪念萨翁

舍得 发表于 2010-4-24 12:34

萨翁 三鞠躬了!
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